La enseñanza, el aprendizaje y el intercambio de la fe católica continúan. Ya sea que diga educación, formación, crecimiento espiritual, conocimiento de la fe, todos son indicativos de las metas y el propósito de la educación religiosa para los niños en St. Stephen. Es nuestro deseo que cada niño que venga a través de nuestra programación tenga la oportunidad de conocer a Jesús, de llegar a conocerlo de una manera profunda y personal. Oramos para que cada niño entienda que él o ella es un Hijo Amado de Dios, amado por lo que es, no por lo que puede hacer.

Estamos aquí para apoyar a los padres, los primeros catequistas en la vida de sus hijos, mientras enseñan y viven una vida de discipulado en Cristo. Nuestros catequistas son voluntarios: padres, abuelos, adultos y adolescentes, todos comparten el amor de Dios y su fe en Jesús con los niños de nuestra parroquia.